Más de 700 niños y jóvenes, se alternaron en escena, dando muestras de los logros alcanzados
Cortesía Desirée Depablos
Fotografías de Joana Céspedes Depablos
El
Ballet de la Mar cautivó al público margariteño con su décima edición del clásico
navideño El Cascanueces, que este año contó con dos escenarios: La Casa de
la Cultura Ramón Vásquez Brito de Porlamar y el Centro de Artes Omar Carreño de
La Asunción.
Además
el público pudo disfrutar de dos diferentes versiones del espectáculo; la obra
completa en 3 actos interpretada por el Ballet Juvenil de la Mar, con invitados
especiales, y la Suite de Cascanueces
coreografiada especialmente para el alumnado de la academia.
Más
de 700 niños y jóvenes, de los
diferentes módulos de enseñanza de la prestigiosa academia, se alternaron en 10
funciones, dando muestras de los logros alcanzados gracias al esfuerzo,
constancia y disciplina.
Como
en años anteriores, contaron con la participación de bailarines invitados,
como: Estefany Di Camillo, del Centro Integral de Danza de Anzoátegui, María Graciela Ramírez, de la escuela de
María Teresa Alford en Barquisimeto y Roberth García, del Ateneo de Carúpano,
quienes compartieron y alternarán los papeles principales con los bailarines
José Orta, Francisco Rivas, Radharani Persaud del Ballet de la Mar.
Pequeños
y adultos llenaron las funciones parta disfrutar de un espectáculo con sello
margariteño, pleno de colores, efectos y sorpresas que se conjugaron para
ofrecer momentos inolvidables, arrancando aplausos, risas y emociones del
público asistente.
Sin
duda, el Ballet de la Mar demostró que su versión de El Cascanueces sigue creciendo igual que su escuela y sus
bailarines. Según la directora, Martha Ildiko, con estas presentaciones El
Ballet de la Mar cierra el año académico y se prepara para nuevos retos y
proyectos que ya tiene en puerta para el año próximo, entre los cuales está el
montaje del segundo acto de El Lago de los Cisnes y el Ballet de Carmen.
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